De acuerdo con las autoridades, el 54% de los turistas que llegan a Israel son cristianos, de los cuales el 18% son peregrinos. Por ello gran parte de las inversiones se destinaron a centros religiosos, con el propósito de impulsar al sector en los próximos años.
“El Ministerio de Turismo ha decidido construir un programa que invierta más de mil millones de shekels en infraestructura, para que una vez que pase la pandemia, podamos ofrecer nuevos servicios a los turistas que vendrán”, mencionó Kobby Barba, Director General Adjunto del Ministerio de Turismo de Israel.
En 2021, las llegadas de turistas fueron de poco más de 400 mil, una cifra muy alejada del récord obtenido en 2019 cuando se registró el ingreso de 4.5 millones de turistas internacionales.
Paralelo a esto, se lanzó una nueva página de turismo religioso, donde los peregrinos encontrarán información valiosa sobre los sitios más importantes para los católicos, evangélicos y cristianos.
El sitio web incluye consejos para planear un viaje a Tierra Santa, entrevistas con líderes religiosos, una amplia galería de fotos y videos y opciones de itinerario desde 7 a 10 días para seguir los pasos de Jesús.
Entre las inversiones, Israel dedicó parte del dinero en mejorar la infraestructura para personas con discapacidad. La Ciudad Vieja de Jerusalén se renovó colocando letreros, revestimiento de piedras desgastadas y letreros con explicación histórica y arqueológica en los diversos puntos de interés de los cuatro barrios.
En el judío se construyeron dos ascensores y un túnel para llevar a los visitantes 22 metros abajo hasta el Muro de los Lamentos que actualmente solo es accesible por escaleras.
Adicional se abrieron nuevas rutas de peregrinaje como el Sendero de Emaús, una ruta de poco más de 17km que comienza cerca del pueblo de Abu Ghosh hasta la Aldea de Emaús Nicópolis, siguiendo los pasos de la historia del Evangelio de Lucas sobre el encuentro de Jesús después de resucitar con dos discípulos.
También se incluyen nuevas salas de exhibición en el Museo Torre de David en Jerusalén. El plan incluye, entre otras cosas, un nuevo centro de visitantes, siete nuevas galerías, una explanada multisensorial, espacios de exhibición, sanitarios públicos y ascensores para una mejor accesibilidad.