La Comisión de Estados Unidos para la Libertad Religiosa Internacional rechazó la detención de líderes religiosos en las protestas en Cuba. La organización exigió la inmediata liberación de los sacerdotes y la aplicación de sanciones contra quienes violan la libertad de culto.
James W. Carr, comisionado de la organización, dijo que el régimen cubano está deteniendo a los religiosos simplemente por protestar pacíficamente y pedir un mayor respeto por los derechos humanos.
“Las principales preocupaciones de derechos humanos en Cuba son las violaciones continuas y sistemáticas de la libertad religiosa, que incluyen la intimidación y el acoso persistente a los líderes religiosos”, dijo el vocero.
La Comisión instó a al gobierno de Estados Unidos a imponer sanciones específicas a las agencias del régimen cubano y a los funcionarios responsables de graves violaciones de la libertad religiosa.
EL ARZOBISPADO DE MIAMI
El arzobispo de Miami, Thomas Wenski, pidió a Dios que ayude a los cubanos que reclaman libertad en las calles y haga que las autoridades cubanas recapaciten en su “obstinación en el poder”.
Wenski pronunció esas palabras en la homilía de la misa especial por Cuba celebrada en la Ermita de la Virgen de la Caridad, la patrona de Cuba, un santuario ligado al exilio cubano en Miami.
En la misa participaron la alcaldesa del condado de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, y el alcalde de la ciudad de Miami, Francis Suárez, y se rezó por el “eterno descanso” de las 37 víctimas del “remolcador 13 de marzo” al cumplirse 27 años de su hundimiento en la bahía de La Habana por “fuerzas represivas”.
Wenski, con la mitra y el báculo de su jerarquía eclesiástica, destacó el derecho a poner “rumbo a la libertad” que tiene un pueblo “cansado de vivir con cadenas” y de “consignas de muerte”.
El arzobispo subrayó que “libertad, patria y vida” es ahora el lema de los que participan en la protestas en Cuba y pidió a Dios que les ayude en esta “gravísima coyuntura”.
También rogó a Dios para que las autoridades cesen en “sus llamadas a la violencia contra su propio pueblo”.
“Ojalá que abra sus oídos a la voz de Dios”, oró Wenski.
Wenski mencionó en su declaración y también en la homilía la visita del papa Juan Pablo II a Cuba en 1998 y el mensaje que dirigió desde Camagüey a los cubanos para que sean, especialmente los jóvenes, “protagonistas de su futuro”.
Entre las preces leídas durante la misa hubo una para “la extinción del comunismo de la faz de la tierra, especialmente en Cuba, Venezuela, Nicaragua y México”.
LA IGLESIA DE CUBA
Entretanto, el grupo de Obispos cubanos también manifestaron su rechazo a la violencia contra miembros de la iglesia en la isla. la Conferencia de Obispos cubanos, publicó un comunicado diciendo que “no podemos cerrar los ojos o entornar la mirada” ante la represión a las manifestaciones.
Los miembros del clero mencionaron el caso del padre Castor José Álvarez, quien fue detenido durante las protestas del domingo en Camagüey.
“La violencia engendra violencia, la agresividad de hoy abre heridas y alimenta rencores para mañana que costará mucho trabajo superar,” agregó la Conferencia de Obispos cubanos, “por eso invitamos a todos a no incentivar la situación de crisis, sino con serenidad de espíritu y buena voluntad, ejercitar la escucha, la comprensión y la actitud de tolerancia, que tenga en cuenta y respete al otro para juntos buscar caminos de una justa y adecuada solución”.