“La cultura popular se enfoca en el romance y las relaciones sexuales, mientras que en la iglesia nos enfocamos en la familia y el servicio a los demás. Y así, la amistad termina siendo ignorada tanto por la sociedad como por la iglesia”, dice Sheridan Voysey.
El autor y orador con sede en Oxford (Reino Unido) ha estado trabajando en un proyecto para traer de vuelta las amistades al centro de la conversación.
Después de años de leer investigaciones sobre las causas de la soledad y la evolución de las relaciones entre adultos, Voysey se sintió llamado a lanzar un “Laboratorio de la amistad”. Las estadísticas en el Reino Unido y otros países occidentales muestran que una de cada cuatro personas no tiene amigos cercanos.
“La amistad es un superpoder que se ha pasado por alto radicalmente en nuestra era”, dice Voysey, pero “hacer amigos es una habilidad que nadie nos enseña, lo que lleva a muchos a dejarla al azar”.
El proyecto de Voysey incluye cursos basados en la investigación, un podcast, campañas en los medios, así como colaboraciones en las artes y la educación.
Encuesta sobre amistad
Sheridan ha preparado una encuesta abierta -se puede acceder clicando aquí (en inglés)– para tener un “foco más detallado del problema”. Las respuestas ayudarán a “aclarar las principales barreras a la amistad” y darán forma al proyecto que está desarrrollando.
“Estoy especialmente interesado en escuchar a los europeos”, dijo Voysey a Evangelical Focus. “Queremos asegurarnos de apuntar exactamente a donde la gente detecte el problema”.
Preguntas y respuestas con Sheridan Voysey
Pregunta. En los últimos años, ¿qué ha dificultado la construcción de buenas amistades?
Respuesta. Hay muchos factores en juego. La investigación encuentra consistentemente que el principal culpable es el ajetreo, ya sea porque trabajamos muchas horas, tenemos que hacer largos viajes al trabajo o llevar a nuestros hijos a tantas actividades extracurriculares que nos queda poco tiempo y energía para los amigos. También somos una generación altamente móvil, con muchos de nosotros mudándonos de ciudad y país por trabajo y otras oportunidades, lo que puede perturbar enormemente la amistad.
“Nuestra sociedad celebra San Valentín, pero no el Día del Amigo”
La falta de confianza también aparece en la investigación, quizás porque amigos anteriores nos han defraudado o incluso traicionado, mientras que otros factores como la timidez, la forma en que las redes sociales nos están entrenando para mediar nuestras relaciones a través de las pantallas, a los efectos pospandemia. El aislamiento social y el trabajo en el hogar también tienen un papel que desempeñar.
Pero una simple razón por la cual la amistad es más difícil para nosotros es que no la reconocemos como una relación fundamental. Tenemos Educación Sexual en las escuelas pero no Educación para la Amistad. Celebramos el Día de San Valentín pero no el Día Internacional de la Amistad. La cultura popular se enfoca en el romance y las relaciones sexuales, mientras que en la iglesia nos enfocamos en la familia y el servicio a los demás. Y así la amistad termina siendo ignorada tanto por la sociedad como por la iglesia.
P. ¿Qué piensa hacer con las respuestas de la encuesta?
R. Después de haber pasado los últimos tres años inmersos en la literatura académica, además de hablar con cientos de personas sobre sus relaciones y elaborar el curso de laboratorio de amistad basado en evidencia, queremos asegurarnos de que estamos rascando donde la gente tiene picazón. Los resultados de esta encuesta nos ayudarán a asegurarnos de que estamos dedicando la cantidad de tiempo adecuada a las habilidades clave necesarias, y servirán de base para el podcast y otros proyectos que estamos planeando. Estoy especialmente interesado en escuchar a los europeos para asegurarnos de que entendemos las barreras que enfrentan en la amistad, para que podamos servirlos bien.
P. Como cristiano, ¿por qué crees que las amistades pueden marcar una diferencia tan grande en la vida de la gente?
“La iglesia es de las pocas instituciones que reúnen a personas de diferentes orígenes y estatus social”
R. Como criaturas hechas a la imagen de Dios, somos relacionales hasta la médula. Es por eso que la soledad nos afecta de forma tan negativa, las relaciones cercanas nos hacen sentir tan bien, y por eso se ha descubierto que la salud física, mental y espiritual mejoran cuando tenemos amistades florecientes. La autora Noreena Hertz ha descrito nuestra era como el “siglo solitario” y creo que las iglesias son fuentes clave de ayuda para este problema, siendo una de las pocas instituciones que quedan que reúnen a personas de diferentes orígenes demográficos, culturales y económicos. Con las herramientas adecuadas podemos ayudar a un mundo solitario a conectarse, siendo buenas noticias para nuestras comunidades y dándoles una muestra de la vida con Dios en el proceso.
P. Cuéntanos algo más sobre el curso.
R. Cuando se publique, el Curso Laboratorio de Amistad estará disponible en varias formas: para que las personas lo hagan por Internet, para que las iglesias lo lleven a cabo en sus comunidades, para lugares de trabajo, deportes y otros grupos comunitarios, y más.
Pronto realizaremos cursos piloto, tendremos académicos listos para evaluar su impacto y una lista de espera de organizaciones que desean asociarse con nosotros. Todo es muy emocionante, y apreciaremos sus oraciones mientras comenzamos esta aventura.