El domingo, los feligreses vieron cómo su pastor transgénero asumía el nuevo nombre que había elegido: Peter.
Beeson le dijo a HuffPost que también era importante para la congregación demostrar la “magnitud de la compasión de Dios”.
“La ceremonia de cambio de nombre nos brindó la oportunidad… de mostrarle a todo el mundo que hay cristianos fieles que apoyan al colectivo LGBTQ+, así como de transmitir un mensaje opuesto al del miedo y el odio que prevalece en la actualidad”,dijo Beeson. “Esto nos ha brindado la oportunidad de decirle a todas esas personas que están revalorando su identidad de género u orientación sexual, sobre todo los jóvenes, que Dios les ama, así como a todos aquellos que han sido creados a su imagen y semejanza”.
“Esto nos ha brindado la oportunidad de decirle a todas esas personas que están revalorando su identidad de género u orientación sexual, sobre todo los jóvenes, que Dios les ama, así como a todos aquellos que han sido creados a su imagen y semejanza”. Reverendo Peter R. Beeson
La Iglesia Luterana de la Trinidad de San Mateo forma parte de la Iglesia Evangélica Luterana de Estados Unidos (ELCA, por sus siglas en inglés), de la corriente protestante heterodoxa. El Sínodo de Nueva York de la ELCA tiene una larga historia de afirmación y bienvenida a miembros del clero LGBTQ y líderes laicos.
A mitad del tradicional servicio dominical, Beeson y la obispa del Sínodo de Nueva Jersey, Tracie Bartholomew, se acercaron a la fuente bautismal de la iglesia. Bartholomew hizo referencia a las ocasiones en las que Dios cambió los nombres de las personas en la Biblia. Luego, un líder de la iglesia le planteó a la congregación una serie de preguntas sobre el apoyo a Beeson en su transición y el hecho de ser una comunidad cristiana que acoge a todos por igual.
Bartholomew bendijo a Beeson con el agua de la pila bautismal y le dio la bienvenida con su nuevo nombre.
“Fue emocionante escuchar cómo la congregación se volvía a comprometer con su larga historia de inclusión y prometer que siempre sería una congregación segura que acoge a todas las personas que buscan una comunidad cristiana”, dijo Beeson sobre la ceremonia.
Daniel Stoll, un miembro del Consejo de la Iglesia, le dijo al HuffPost que la ceremonia fue “hermosa”. La iglesia estaba repleta de visitantes, tres veces más de lo usual para un servicio dominical, señaló.
Sin embargo, Stoll dijo que la congregación también ha recibido “mucha negatividad” a través de Internet y llamadas telefónicas a la oficina por parte de quienes “piensan que pueden juzgar como si fueran Dios”.
“Las personas trans y los homosexuales tienen derecho a ser auténticos, como todos los demás. Dios no cometió un error”, le explicó Stoll al HuffPost. “Jesús nos enseña a amar a cada persona. El odio tiene que detenerse”.