Salmo 103:3 El es quien perdona todas tus iniquidades,
El que sana todas tus dolencias;

La definición de la palabra dolencia  hace referencia a una enfermedad, padecimiento, achaque, quebranto, afección, destemple, angustia o desdicha sin importar su síntoma y también las causas. En otro forma también podría asociarse con calumnias, denigración, maledicencia, injuria, deshonra, desprestigio, afrenta, oprobio, vergüenza y agravio que causan dolor y molestias y que  afectan la calidad de vida de las personas.

Creo que todos en cierto momento hemos padecido este tipo de dolores y quebrantos. Es importante darnos cuenta que Dios tiene la capacidad de sanar todas nuestras dolencias incluyendo físicas como psicológicas.

No obstante debemos prestar atencion al prerrequisito que se haya en el mismo versículo, es decir que para que Dios sane nuestras dolencias  habrá que cumplir con él, en este caso, a cual requisito se refiere?   Dios nos perdonara  sin embargo para recibir este perdón necesitamos arrepentirnos.

El arrepentimiento no significa que deba castigarse a usted mismo, el arrepentimiento significa  volver a Dios (Griego: Metanoeo, Hebreo: Teshuváh)

La palabra «arrepentirse» puede comenzar a ser entendida por la palabra griega “metanoeo» ( μετανοέω) se refiere a dar media vuelta  y  también significa arrepentirse. Está íntimamente relacionado con todo aquello que signifique que la persona quiere dar un giro a sus pensamientos.  La Nueva Concordancia Griega del Hombre nos dice que «es un cambio de mente y corazón que se aleja del egocentrismo y el pecado, y se acerca a Dios y a la santidad».

La palabra comparable usada en el Antiguo Pacto es “teshuváh» (תשובה). Esta palabra es generalmente traducida como «regreso», o «ir hacia atrás». La raíz verbal es “shuv”, que significa volver.

Si tenemos un cambio en nuestra mente es decir nuestra manera de pensar,  indudablemente  este cambio afectara nuestro  corazón.

 Mateo 15:19 Porque del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios, las blasfemias.

El arrepentimiento es un proceso que nos lleva de vuelta a Dios, y nos conduce  a tener  una relación con él, como en el principio cuando Dios creo al hombre en Génesis .

Qué es Iniquidad?

En un sentido bíblico, la iniquidad existe desde el principio, y aparece por primera vez en el Ángel Caído: “fuiste lleno de iniquidad, y pecaste” (Ezequiel 28:16).

La iniquidad es maldad, impiedad o culpa, y su gravedad está por encima del pecado. Como tal, es una ofensa contra Dios, fundada en el desconocimiento y rechazo de las leyes del Señor. De hecho, si atendemos la versión en griego antiguo de la Biblia, notaremos que iniquidad ha sido traducida desde el término ἀνομία (anomía), que significa ‘desprecio por las leyes’, de lo cual se extrae que la iniquidad implica el irrespeto y la no sujeción a la autoridad de Dios o de la ley


Salmos 41:4 
Yo dije: Jehová, ten misericordia de mí;
sana mi alma, porque contra ti he pecado.

Salmos 147:3 El sana a los quebrantados de corazón,
Y venda sus heridas.

 Juan 5:14 Después le halló Jesús en el templo, y le dijo: Mira, has sido sanado; no peques más, para que no te venga alguna cosa peor.

Tenga la absoluta y completa seguridad de que el Señor Jesucristo es su sanador, el que le rescatará del  hoyo de su vida, el que le coronará de favores y misericordias, el que le saciará de bien, de modo que rejuvenezca como el águila. salmo 103:4,5

Jeremías 33:6 He aquí que yo les traeré SANIDAD y medicina; y los curaré, y les revelaré abundancia de paz y de verdad.

Ciertamente todos necesitamos recibir la sanidad de Dios, en nuestra vida emocional, tales como quebrantamientos, decepciones, necesitamos recibir sanidad  en nuestras relaciones humanas, familiares, laborales, sociales, necesitamos también obtener la sanidad de nuestra  psique, que incluyen trastornos mentales, de ansiedad, depresión,  trastornos de toda índole como obsesivo compulsivo, borderline, bipolar, etc.  y en nuestro cuerpo físico todo tipo de enfermedades que afectan nuestra salud y bienestar.

¿Desea tiempos de refrigerio y sanidad en su vida?  ¡Regrese a Dios, vuelva a Dios!

Hechos 3:19 nos da una promesa y esta a nuestro alcance

Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que vengan de la presencia del Señor tiempos de refrigerio

 

 

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Nació en Parral, Chihuahua, México. Casada con Luis Ortega Madrid, es madre de tres hijas, Mirka, Aimee y Paola. Administra su propio negocio en la ciudad de San Diego Ca., ciudad donde radica. “Empecé esta maravillosa carrera de amar y servir al señor Jesucristo hace 38 años y ha sido durante este periodo de tiempo que Él ha enriquecido mi vida espiritual, la de mi familia y la de mis amigos, he recibido diversas capacitaciones y entrenamientos en denominaciones pentecostales, asambleas De Dios y en la iglesia local en Anaheim, Ca.”