Una nueva colonia llamada “Jerusalén” construida con el apoyo de evangélicos, católicos y judíos, acogerá a familias afectadas por la erupción del volcán de Fuego en Guatemala.
El 3 de Junio de este año se produjo una devastadora erupción del Volcán de Fuego en Guatemala que causó un elevado número de muertos y desaparecidos (las cifras se estiman entre 130 y 1.000), cientos de heridos y cerca de dos millones de habitantes afectados. Desde el primer momento diferentes organizaciones, incluyendo a la comunidad judía de Guatemala, la embajada de Israel en Guatemala y organizaciones judías como CADENA, IsraAID y Zaka, comenzaron a apoyar a los afectados de todas las formas posibles.
El rabino Yosef Garmon, rabino principal de la comunidad judía de Guatemala, cuenta sobre las importantes muestras de solidaridad que vinieron de diferentes sectores de la sociedad: “Se realizó una coalición humanitaria entre judíos, evangélicos y católicos para dar la mayor ayuda posible”.
Incluso antes de la tragedia comenzó una labor de la organización israelí ZAKA en Guatemala. La organización ZAKA es una comunidad de voluntarios fundada en Israel y especializada en brindar ayuda tras catastrófes de todo tipo. “Unos meses atrás capacitamos aquí para formar un equipo de ZAKA en Guatemala. En el primer grupo formamos a 45 personas y después de la tragedia enviamos al grupo y empezaron a ayudar en el rescate”.
El rabino Garmon relata además que la comunidad judía recogió importantes cantidades de comida e insumos para ayudar a los afectados, a lo que se unió un esfuerzo de la embajada de Israel en Guatemala que coordinó la llegada de una delegación de médicos israelíes especialistas en quemaduras que llegaron al país para atender a personas afectadas.
Incluso después de las necesidades inmediatas de la tragedia, la coalición humanitaria formada por evangélicos, católicos y judíos, decidió seguir apoyando a las personas afectadas: “Vimos la necesidad, por la forma de vivir que tenían. Hicimos una jornada de dentistas y pronto haremos una jornada de óptica, pero nos dimos cuenta que la necesidad más grande era la vivienda y decidimos enfocarnos en eso”, cuenta el rabino Garmon.
Entre la organización católica Amigos por la Salud y la Vida – a través de su director Jorge Gramajo y el padre Manuel -, la organización evangélica Casa de Dios – a través del pastor Raúl Marroquín y el pastor Víctor Cruz – y la organización israelí ZAKA formaron una coalición para construir casas. “Consiguieron un lugar bonito, propiedad del señor Erik Ernesto, cerca de la ciudad de Escuintla, y comenzaron un proyecto de 100 casas. Este lunes vamos a comenzar a entregar algunas casas. Además logramos conseguir donaciones de muebles, cocinas y parques para niños. Desde este lunes va a haber gente viviendo en el lugar y, con la ayuda de Dios, vamos a tener una colonia completa” relata el rabino Yosef Garmon.
La colonia llevará el nombre “Jerusalén” en honor a la larga amistad que existe entre Israel y Guatemala y el reciente traslado de la embajada de Guatemala a Jerusalén el pasado mes de Mayo. El rabino Yosef Garmon cuenta además que esta amistad no solo se refleja a nivel gubernamental sino también en el cariño entre los pueblos: “Hay amor de Guatemala a Israel y de Israel a Guatemala. En mayo hicimos una marcha por Israel donde participaron 25.000 personas. La gente está muy contenta con esta ayuda, aman mucho a Israel”.
El rabino Garmon cuenta además que la coalición humanitaria formada buscará también replicar este modelo en otros países de la región: “Nosotros en Israel tenemos un Estado, donde cada día hay más espiritualidad, avances, tecnología y más. Pero lamentablemente mucha gente en el mundo opina en contra de Israel. La idea es fortalecer el amor a Israel a través de acciones humanitarias, no solo en Guatemala sino en toda América Latina. Esta coalición humanitaria va a trabajar en toda América Latina y vamos a hacer cosas grandes. Ya estamos también en Colombia viendo el tema del hambre y queremos comenzar a enviar comida para allá. Queremos mostrar la cara bonita de Israel con acciones humanitarias y fortalecer el amor que existe entre la gente en América Latina e Israel” concluye el rabino Garmon.