Según menciona “El Nuevo Herald”, el 89% de los pastores evangélicos dicen que «los eventos actuales concuerdan con lo que Jesús dijo que ocurriría antes de que Él regresase a la tierra”.
El informe también sostiene que la idea es compartida en un 97% por aquellos pastores que interpretan las escrituras cristianas de forma literal. En menor medida aparecen los menores de 44 años y las congregaciones de más de 250 fieles.
Además, solo un 11% de los pastores manifestaron que el coronavirus y sus consecuencias no tienen relación con la palabra de Jesús.
La encuesta puntualiza que ocho de cada diez personas dicen que la pandemia traerá la pérdida de la “moral tradicional”, la aparición de “falsos profetas” y las personas dejarán la iglesia de manera significativa. Incluso, dicen que habrá guerras y desastres.
No obstante, otros pastores (70%) piensan que existirá un aumento del antisemitismo y hambre.
“Muchos de estos sentimientos comenzaron a expresarse en enero, antes de que se conociese el prospecto de una pandemia global”, dijo el director ejecutivo de LifeWay Research, Scott McConnell.
Por otro lado, los encargados de la encuesta afirman en que los vertiginosos cambios sociales añadidos para detener la propagación del virus y el impacto que ha tenido en las personas ha “servido como recordatorio de nuestra mortalidad”. Y por tal motivo, esto ha generado que se interprete la pandemia como un anticipo al fin del mundo.
McConnell indicó que los pastores encuestados sienten que en medio de la pandemia lo más inmediato “no es acaparar papel higiénico ni ayudar a la gente a prepararse para el regreso de Cristo”. Pero, cuatro de cada diez pastores no están seguros de que su regreso sea tan pronto.