El dinero es vital para vivir… pero nunca hay que confundir su verdadero propósito, este es un medio, no es la vida

Las dificultades creadas por dinero o cuestiones materiales son muy complicadas. Bien se dice que el dinero lo invento el diablo, ya que cuando se trata de defender lo que uno considera propio, (aunque no lo sea) hasta los buenos modales y la rectitud se llegan a olvidar.La percepción de los bienes materiales y el dinero puede cambiar mucho dependiendo básicamente de la integridad, el respeto y los valores que cada quien tenga. El dinero en especial tiene la virtud de sacar el cobre de las personas.

Para unos, hablar de dinero es un estímulo y un símbolo de éxito, en cambio para otros especialmente los que no cuentan con una independencia económica y material, este tema puede convertirse en un tema amargo, incómodo y con un tono delicado.

¿A quién valoras más a la persona o al dinero? Ten cuidado en no ponerle precio a las personas que quieres y valor a las cosas que tienes.

En ambos casos, tratar con asuntos de dinero es un problema… hasta en las mejores familias. Este tema, fácilmente causa malas interpretaciones, disgustos que llegan a crear conflictos que terminan con relaciones queridas.

El dinero es un medio, una herramienta y en casos un lujo que bien utilizado es una bendición que ayuda, abre puertas y otorga grandes beneficios. Sin embargo cuando se le idolatra y se le adora como un culto sagrado, generalmente acaba con el valor de la persona atribuyendo un precio más alto al aspecto material.

«El dinero, mal enfocado puede distorsionar la visión y confundir a cualquiera»

El tema de la riqueza en la sociedad moderna se relaciona directamente con la felicidad, el éxito y la independencia. Sin embargo, la realidad el dinero en sí, es un reflejo de valores más profundos. Es el indicador de cómo cada persona se relaciona con su integridad, el esfuerzo, el cómo lidiar con obstáculos, con el respeto y también con su sensibilidad, su envida, su avaricia etc

Limitar la felicidad solamente a las posesiones, el prestigio o el dinero sería una gran perdida y mentira. La verdadera riqueza, radica en la percepción y la satisfacción que cada persona encuentre en su vida, en sus relaciones y en su crecimiento personal.

El dinero y las cosas materiales no crean problemas, son las personas que lo poseen y las que lo desean los reales causantes. Las discusiones, las peleas y los malos entendidos son creados por la envida, la lucha de poder, la soberbia, pruebas muy difíciles de sobrepasar sobre todo cuando hay un poco más de dinero a la mano.

La riqueza es una actitud, una manera de vivir y una manera de ser, no tiene nada que ver con la cantidad de posesiones y cuentas bancarias.

La receta

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El dinero una herramienta para vivir

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Ingredientes

1 taza de integridad – sinceridad y honestidad
1 taza de responsabilidad – cuidado y manejo apropiado de la persona y el dinero
2 cucharadas de honor- valor de la palabra, confianza, rectitud personal
1 manojo de gratitud – reconocer las bendiciones, humildad al actuar
1 pieza de sensibilidad – trato con respeto a todos aparte de su situación
1 rebanada de esfuerzo – trabajo honesto y constante

Recomendación del chef

Si tienes dinero, ayuda a los que no lo tienen. Ya que el que comparte sus bendiciones, se le multiplican. Además, tú no eres nadie para juzgar a los menos afortunados. Dar y ayudar siempre hace que la persona más valiosa y más feliz.

Como poder balancear el dinero y la felicidad

Es importante ser práctico con el dinero sin caer en la avaricia. Entender cómo utilizar los bienes materiales para el bienestar y no para controlar o presumir. Es fácil caer en la trampa de la codicia, la envida y la prepotencia.
El dinero es solo un reflejo de los valores personales. La confianza y el honor, la rectitud, la integridad y la claridad para manejar todos los aspectos materiales, son los mejores indicadores para describir la esencia de persona a pesar de tener o no dinero.
El dinero tiene un valor relativo. ¿Cuánto es mucho? Todo depende de quien lo tenga, quien lo necesite y como lo utilice. Siempre habrá divisiones, personas más afortunadas que otras, la cuestión no es cuanto tienes, sino que haces con lo que tienes.