El gobierno del presidente Donald Trump condenó el martes al Estado Islámico por cometer “genocidio” contra los cristianos y otras minorías en áreas bajo su control. El secretario de Estado Rex Tillerson dijo que el grupo es “claramente responsable de genocidio” contra cristianos y yazidíes en Irak y de musulmanes chiíes en Siria y otras partes.
El Departamento de Estado dio a conocer su informe anual sobre libertad religiosa en el mundo y Tillerson dijo que lo hizo para “eliminar cualquier ambigüedad” respecto a declaraciones sobre el genocidio hechas por su predecesor John Kerry.
En marzo del 2016, Kerry determinó que estaba ocurriendo genocidio en áreas controladas por el Estado Islámico, pero fue criticado por legisladores y grupos religiosos por no emitir la conclusión antes.
«El Estado Islámico sigue violando, secuestrado, esclavizando y matando a miembros de múltiples religiones y etnias”, dijo Tillerson en declaraciones a la prensa. “El grupo es claramente responsable de genocidio contra yazidíes, cristianos y musulmanes chiíes en áreas que controla.
Es responsable además de crímenes contra la humanidad y limpieza étnica contra esos mismos grupos y, en algunos casos, contra suníes, kurdos y otras minorías. La protección de esos grupos _ y otras víctimas de extremismo violento _ sigue siendo una prioridad de derechos humanos para el gobierno de Trump”.
El informe de libertad religiosa, prescrito por el Congreso, cubre el 2016 y no habla de la decisión de Trump de suspender temporalmente la llegada a Estados Unidos de todos los refugiados, muchos de los cuales escapan de persecución religiosa.
Un apéndice del informe sobre refugiados dice que más de 70% de los casi 85.000 admitidos en Estados Unidos en el 2016 provinieron de cinco naciones _ Congo, Siria, Mianmar, Irak y Somalia _ donde, dice el reporte, la libertad religiosa está amenazada. Siria y Somalia son dos de los seis países musulmanes incluidos en la prohibición de visas ordenada por Trump.