El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, António Guterres, declaró, durante un encuentro con el patriarca de Moscú y toda Rusia, Kiril, que el cristianismo forma parte de la cultura de Oriente Medio, e instó a crear condiciones para el regreso de los fieles a Irak y Siria.
«Estoy profundamente convencido de que, tras la estabilización en Siria e Irak y el hallazgo de una solución política, resultará muy importante garantizar la posibilidad de regreso a los cristianos y de todas las minorías religiosas (…) a su país de origen», dijo Guterres, agregando que se trata de un tema que lo preocupa mucho.
El jefe de la ONU recordó que los primeros cristianos llegaron a esas tierras antes de la aparición del islam, y «forman parte de la identidad de la región».Guterres expresó su preocupación además por la suerte de otras minorías religiosas perseguidas, como, en particular, la de los rohinyás en Birmania, y aseguró que los organismos religiosos deben jugar un papel decisivo en la solución de esos problemas.
«Aprecio mucho precisamente por eso el hecho de que la Iglesia Ortodoxa rusa sea partidaria del diálogo entre las religiones, no solo dentro de su país, sino además a nivel internacional», advirtió el alto funcionario.
El jefe de la ONU, así como los mandatarios portugués y senegalés, Marcelo Rebelo de Sousa y Macky Sall, viajaron a Rusia con motivo del Mundial de la FIFA Rusia 2018.